Autor/a

José Manuel Sánchez Martín

Coautor/es

Juan Ignacio Rengifo Gallego (SIN ORGANIZACIÓN ASIGNADA)

La Raya luso-extremeña se extiende a lo largo de 422 km lineales, sobre un territorio que se caracteriza por la acumulación de especificidades en términos de biodiversidad y culturización.  Como consecuencia de ello, la Raya cuenta con un amplio y valioso patrimonio histórico, artístico e inmaterial, fruto de un proceso histórico en el que han sido frecuentes las contiendas bélicas, aunque también se forjó merced al carácter amigable de sus gentes, tanto a un lado como al otro de esta frontera. Asimismo, y en relación con ese carácter periférico y fronterizo, en el que se registra un acusado vacío demográfico, todo el territorio está  jalonado por numerosos espacios naturales que configuran espacios únicos y de singular belleza. Sendos atractivos configuran la presencia de un elevado potencial para desarrollar la actividad turística, si bien, cuando comparamos esa virtualidad con la realidad plasmada sobre criterios como la oferta de alojamientos y niveles de ocupación, observamos la inadaptación de ambos aspectos.

Palabras clave: Turismo, Frontera, Potencial Turístico, SIG, Extremadura.